Afrontar una instalación eléctrica

REBT Las instalaciones eléctricas se enmarcan en el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión que se centra en las instrucciones técnicas (ITC) BT 01 a BT52, esta última referente a las instalaciones con fines especiales y a la infraestructura para recargar vehículos eléctricos.

Distribuir la corriente

El REBT fija las tensiones nominales que suelen ser empleadas en las distribuciones de corriente alterna, que serán las siguientes: 230 V entre fase y neutro; 230 V entre fases de redes trifásicas para tres conductores; y 400 V entre fases para redes trifásicas de cuatro conductores. El REBT también recoge que la frecuencia usada en la red será de 50 Hz.

La carga de la instalación y el grado de electrificación.

Al diseñar una instalación eléctrica habrá que hacer un estudio previo de las cargas eléctricas que se estiman. Para saber la carga eléctrica de una instalación habrá que conocer bien la potencia de todos los receptores que van a instalarse y conectarse al mismo simultáneamente. La suma de las potencias equivaldrá a la carga de la instalación.

Sin embargo, no siempre es fácil saber la carga, ya que el REBT establece el grado de las viviendas en función de la utilización que se vaya a alcanzar. Los grados de electrificación fijados son los dos siguientes:

Grado de electrificación elevada. Corresponde a viviendas con una previsión de utilización de aparatos electrodomésticos por encima de la electrificación básica.

Grado de electrificación básica. Cubre las posibles necesidades de utilización primarias sin tener que afrontar obras de adecuación. Permite el uso de aparatos eléctricos de utilización común en la vivienda.

Esquema multifilar y unifilar

Para interpretar más sencilla y rápidamente las instalaciones eléctricas, éstas se representan en esquemas que incluyen los distintos elementos hallados durante la instalación. Podemos encontrar dos esquemas:

Los esquemas multifilares llegan al detalle de la instalación y aportan una idea clara del funcionamiento y la ejecución del cableado, por lo que podrían repararse fácilmente en caso de darse el escenario.

Los esquemas unifilares se emplean como primer plano de contacto con la instalación. Aportan una idea general de la instalación, así como de la situación de los elementos y del grado de electrificación.

La electrificación básica

C5 circuito de distribución interna. Alimenta las tomas de corriente en cuartos de baño y las bases auxiliares del cuarto de cocina.

C4 circuito de distribución interna. Alimentar la lavadora, el termo eléctrico y el lavavajillas.

C3 circuito de distribución interna. Alimentar la cocina y el horno.

C2 circuito de distribución interna. Se ocupa de alimentar el frigorífico y de las tomas de corriente de uso general.

C1 circuito de distribución interna. Alimenta los puntos de iluminación.

La electrificación elevada

Especial para viviendas con una previsión de aparatos electrodomésticos tan importante que obligue a instalar más de un circuito de cualquiera de los tipos citados arriba.

C12 Circuitos adicionales de cualquiera de los tipos C3 o C4, cuando se estimen previamente; o circuito adicional del tipo C5, cuando las tomas de corriente pasen de 6. Se colocará un interruptor diferencial como mínimo, tanto para la electrificación básica como para la elevada.

C11 Circuito de distribución interna, para alimentar el sistema de automatización y para la gestión técnica de la seguridad y la energía, cuando haya previsión de ello.

C10 Circuito de distribución interna, para la instalación de secadoras independientes.

C9 Circuito de distribución interna, para la instalación de aire acondicionado, cuando hay previsión de éste.

C8 Circuito de distribución interna, para la instalación de calefacción eléctrica, cuando hay previsión de ésta.

C7 Circuito adicional del tipo C2, por cada 20 tomas de corriente de uso general o si la superficie aprovechable de la vivienda es superior a 160 metros cuadrados.

C6 Circuito adicional del tipo C1, por cada 30 puntos de luz.